FIESTA PORTEÑA contundente en el Clásico Omega (G2).
Fiesta Porteña consiguió su primera victoria jerárquica al imponerse con contundencia en el Clásico Omega (G2), disputado sobre 1600 metros en una pista de grama muy pesada en San Isidro. La hija de Fortify reservada del Haras Santa Inés, fue llevada con gran oficio por Martín Valle, que la mantuvo expectante en el fondo hasta el derecho, donde desató una larga atropellada para pasar de largo a 150 del disco.La pupila de Enrique Martín Ferro, que nunca había competido más allá de las catorce cuadras, mostró fondo y decisión, ganando en 1'41"82 y sumando así su cuarto triunfo en seis salidas.La zaina superó por 3½ cuerpos a Lacanian Ink, quedando luego Same Treasure y Guiltless en el marcador. Actuación consagratoria para una potranca que promete seguir en ascenso.
Fiesta Porteña consiguió su primera victoria jerárquica al imponerse con contundencia en el Clásico Omega (G2), disputado sobre 1600 metros en una pista de grama muy pesada en San Isidro. La hija de Fortify reservada del Haras Santa Inés, fue llevada con gran oficio por Martín Valle, que la mantuvo expectante en el fondo hasta el derecho, donde desató una larga atropellada para pasar de largo a 150 del disco.
La pupila de Enrique Martín Ferro, que nunca había competido más allá de las catorce cuadras, mostró fondo y decisión, ganando en 1'41"82 y sumando así su cuarto triunfo en seis salidas.
La zaina superó por 3½ cuerpos a Lacanian Ink, quedando luego Same Treasure y Guiltless en el marcador. Actuación consagratoria para una potranca que promete seguir en ascenso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario