El entrenador Gary 'Jack' Duncan debe la vida a los dueños de Adonisea después de un ataque cardíaco en las carreras
El entrenador de Queensland, Gary 'Jack' Duncan, dice que tiene "suerte de estar vivo" después de sufrir un infarto durante una carrera en Doomben el mes pasado.
El corazón de Duncan se detuvo cuando colapsó después de la primera carrera y los transeúntes trabajaron tan duro para salvarlo mediante resucitación cardiopulmonar (RCP) que sus costillas se rompieron.
El entrenador, que ahora se recupera en casa después de someterse a una cirugía para insertar dos stents, contó su terrible experiencia en el programa matutino de Steve Hewlett en Radio Tab Australia.
“Llegué a las carreras con cuatro caballos, detuve mi camioneta y comencé a descargar cuando sentí que se me encogía la garganta”, dijo. “Tomé un par de sorbos de agua y todavía me sentía un poco raro y lo siguiente que más o menos me desmayé fue. Acabo de tener un infarto.
“Un par de muchachos jóvenes dueños de Adonisea estaban allí. Solo habían hecho un curso de actualización [primeros auxilios] la semana pasada y realmente me salvaron. Fue una suerte que no estuvieran en el bar. Sin ellos probablemente no estaría aquí.
“Simplemente empezaron a trabajar en mí. Trabajaron bastante duro conmigo. Estoy bastante adolorido. Creo que se rompieron algunas costillas. Trabajaron en mí durante unos diez minutos antes de que me recuperara. Luego vinieron los tipos con el desfibrilador ".
Duncan ha entrenado a 285 ganadores profesionales y tiene su sede en Sunshine Coast.
“Me mantuvieron en marcha hasta que llegó la ambulancia”, dijo. “Sin ellos, muchachos, estoy seguro de que no estaría aquí. Es una suerte que haya sucedido donde sucedió. Tengo suerte de estar vivo ".
El entrenador de Queensland, Gary 'Jack' Duncan, dice que tiene "suerte de estar vivo" después de sufrir un infarto durante una carrera en Doomben el mes pasado.
El corazón de Duncan se detuvo cuando colapsó después de la primera carrera y los transeúntes trabajaron tan duro para salvarlo mediante resucitación cardiopulmonar (RCP) que sus costillas se rompieron.
El entrenador, que ahora se recupera en casa después de someterse a una cirugía para insertar dos stents, contó su terrible experiencia en el programa matutino de Steve Hewlett en Radio Tab Australia.
“Llegué a las carreras con cuatro caballos, detuve mi camioneta y comencé a descargar cuando sentí que se me encogía la garganta”, dijo. “Tomé un par de sorbos de agua y todavía me sentía un poco raro y lo siguiente que más o menos me desmayé fue. Acabo de tener un infarto.
“Un par de muchachos jóvenes dueños de Adonisea estaban allí. Solo habían hecho un curso de actualización [primeros auxilios] la semana pasada y realmente me salvaron. Fue una suerte que no estuvieran en el bar. Sin ellos probablemente no estaría aquí.
“Simplemente empezaron a trabajar en mí. Trabajaron bastante duro conmigo. Estoy bastante adolorido. Creo que se rompieron algunas costillas. Trabajaron en mí durante unos diez minutos antes de que me recuperara. Luego vinieron los tipos con el desfibrilador ".
Duncan ha entrenado a 285 ganadores profesionales y tiene su sede en Sunshine Coast.
“Me mantuvieron en marcha hasta que llegó la ambulancia”, dijo. “Sin ellos, muchachos, estoy seguro de que no estaría aquí. Es una suerte que haya sucedido donde sucedió. Tengo suerte de estar vivo ".
El corazón de Duncan se detuvo cuando colapsó después de la primera carrera y los transeúntes trabajaron tan duro para salvarlo mediante resucitación cardiopulmonar (RCP) que sus costillas se rompieron.
El entrenador, que ahora se recupera en casa después de someterse a una cirugía para insertar dos stents, contó su terrible experiencia en el programa matutino de Steve Hewlett en Radio Tab Australia.
“Llegué a las carreras con cuatro caballos, detuve mi camioneta y comencé a descargar cuando sentí que se me encogía la garganta”, dijo. “Tomé un par de sorbos de agua y todavía me sentía un poco raro y lo siguiente que más o menos me desmayé fue. Acabo de tener un infarto.
“Un par de muchachos jóvenes dueños de Adonisea estaban allí. Solo habían hecho un curso de actualización [primeros auxilios] la semana pasada y realmente me salvaron. Fue una suerte que no estuvieran en el bar. Sin ellos probablemente no estaría aquí.
“Simplemente empezaron a trabajar en mí. Trabajaron bastante duro conmigo. Estoy bastante adolorido. Creo que se rompieron algunas costillas. Trabajaron en mí durante unos diez minutos antes de que me recuperara. Luego vinieron los tipos con el desfibrilador ".
Duncan ha entrenado a 285 ganadores profesionales y tiene su sede en Sunshine Coast.
“Me mantuvieron en marcha hasta que llegó la ambulancia”, dijo. “Sin ellos, muchachos, estoy seguro de que no estaría aquí. Es una suerte que haya sucedido donde sucedió. Tengo suerte de estar vivo ".
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