EMOTION ORPEN fue retirado de las pistasEsos 2000 metros en la pista de arena de Palermo que iban a ser preparatorios para el Longines Latinoamericano (G1) del 24 de octubre en Maroñas terminaron convertidos en los últimos de la campaña de Emotion Orpen (Orpen). El Clásico Italia (G3) marcó el adiós para el noble zaino que Firmamento se reservó para no malvender por tener una lesión en un ojo y que estaba con una pata en el avión para viajar a Uruguay. Pero una lesión al llegar cuarto este domingo cambió el rumbo. Rodrigo Blanco se bajó poco después de cruzar el disco y la tristeza del jinete estaba en sintonía con la manquera del caballo, que fue subido a una ambulancia y terminó el día en su box en San Isidro, con cuidados especiales y un anuncio que nadie deseaba para este momento: "Fue la última batalla y será padrillo". La determinación desde la cabaña no tardó en llegar con el panorama a la vista.
"Punto final para la carrera en las pistas de Emotion Orpen. Con todo el dolor del mundo, pero con la satisfacción de haberlo disfrutado tanto, lo despedimos. Una lesión en la cuerda de su mano izquierda y en la paleta (producida en carrera) nos obliga a decir basta. Gracias Ariel (peón), Hugo (Galopador), Silvita (capataz), familia Gaitán (entrenadores) y a todo el equipo de trabajo por haberlo cuidado tanto. Gracias Rodrigo Blanco por tu compromiso y por tu amor al tuerto, nos va a quedar la espina del Latino... algún día la vamos a sacar. ¡Pero muchos G1 más nos esperan! Gracias a todos los que pasaron por su vida, desde los chicos del haras, pasando por el equipo de City Bell que lo cuidó en la cuarentena y especialmente a Carly Etchechoury y Leandro Gonçalves, quienes fueron fundamentales en sus comienzos. Podrán haber muchos mejores, pero ninguno será como él. Ese corazón de guerrero lo convierte en único. No fue uno más, con sus limitaciones nos enseñó que todo es posible si se pone el corazón. Un claro ejemplo de superación. Gracias Tuerto", describió Ezequiel Valle, en palabras personales que son el mensaje de la cabaña entera.
A los 6 años, el hijo de la estadounidense Unavailable (Distorted Humor) se despide con ocho triunfos en 24 carreras, incluyendo los grandes premios Provincia de Buenos Aires y Dardo Rocha, en La Plata, y Estrellas Classic, en Palermo, en junio pasado. Además, logró victorias jerárquicas en los clásicos Perú (G2) y Otoño (G2), en el Argentino, y Clausura (G2) y Organización Sudamericana del Fomento del SPC (G3), en el Bosque. Su legajo, para dar más muestras de su protagonismo desde potrillo, abarca además dos placé en el República Argentina (G1) y otro en el Classic, entre otras figuraciones clásicas. Lo espera el haras, desde la temporada 2022. Quedarán los detalles, que llegarán con el tiempo.
"Con todo el dolor del mundo nos toca despedirte de las pistas. Me encantaría poder tener salud para poder entrenar algún hijo tuyo, porque seguramente me vas a dar muchas satisfacciones como padrillo. Te vamos a extrañar mucho", compartió en sus redes Alfredo Gaitán Dassie, su último entrenador, junto a una imponente foto de parte del equipo en la pista de césped del Campo 2 de San Isidro que fue tomada tras ganar el Dardo Rocha el año pasado.
Rodrigo Blanco, que llegó a su montura en las últimas carreras, agradeció al haras, al equipo de Gaitán y también dejó sus sensaciones: "Gracias, Tuerto querido. Te voy a extrañar. Hago un pequeño reconocimiento a un caballo con una nobleza inalcanzable. Ustedes, que nos llevan a lo más alto, que dejan hasta lo último en cada carrera, gracias. Me toca a mí acompañarte, comprendiendo tu lesión y sufriendo igual que vos. Pero acá estoy, a tu lado y eternamente agradecido por los momentos que me hiciste vivir. Tu nobleza y corazón no se pueden explicar con palabras. Te miraba a los ojos y entendía todo lo que sentías en ese momento. Peleaste hasta el final, como todo guerrero".
Con éxitos desde los 1800 a los 2400 metros y un quinto puesto en el Carlos Pellegrini (G1) en su única presentación sobre césped, el ejemplar nacido el 5 de septiembre de 2015 fue la primera cría de su madre tras ser importada desde los Estados Unidos y tiene un hermano materno, el potrillo Unava Hit (Hit t a Bomb), en entrenamiento en el mismo hipódromo que deja para iniciar una nueva vida.
Esos 2000 metros en la pista de arena de Palermo que iban a ser preparatorios para el Longines Latinoamericano (G1) del 24 de octubre en Maroñas terminaron convertidos en los últimos de la campaña de Emotion Orpen (Orpen). El Clásico Italia (G3) marcó el adiós para el noble zaino que Firmamento se reservó para no malvender por tener una lesión en un ojo y que estaba con una pata en el avión para viajar a Uruguay. Pero una lesión al llegar cuarto este domingo cambió el rumbo. Rodrigo Blanco se bajó poco después de cruzar el disco y la tristeza del jinete estaba en sintonía con la manquera del caballo, que fue subido a una ambulancia y terminó el día en su box en San Isidro, con cuidados especiales y un anuncio que nadie deseaba para este momento: "Fue la última batalla y será padrillo". La determinación desde la cabaña no tardó en llegar con el panorama a la vista.
"Punto final para la carrera en las pistas de Emotion Orpen. Con todo el dolor del mundo, pero con la satisfacción de haberlo disfrutado tanto, lo despedimos. Una lesión en la cuerda de su mano izquierda y en la paleta (producida en carrera) nos obliga a decir basta. Gracias Ariel (peón), Hugo (Galopador), Silvita (capataz), familia Gaitán (entrenadores) y a todo el equipo de trabajo por haberlo cuidado tanto. Gracias Rodrigo Blanco por tu compromiso y por tu amor al tuerto, nos va a quedar la espina del Latino... algún día la vamos a sacar. ¡Pero muchos G1 más nos esperan! Gracias a todos los que pasaron por su vida, desde los chicos del haras, pasando por el equipo de City Bell que lo cuidó en la cuarentena y especialmente a Carly Etchechoury y Leandro Gonçalves, quienes fueron fundamentales en sus comienzos. Podrán haber muchos mejores, pero ninguno será como él. Ese corazón de guerrero lo convierte en único. No fue uno más, con sus limitaciones nos enseñó que todo es posible si se pone el corazón. Un claro ejemplo de superación. Gracias Tuerto", describió Ezequiel Valle, en palabras personales que son el mensaje de la cabaña entera.
A los 6 años, el hijo de la estadounidense Unavailable (Distorted Humor) se despide con ocho triunfos en 24 carreras, incluyendo los grandes premios Provincia de Buenos Aires y Dardo Rocha, en La Plata, y Estrellas Classic, en Palermo, en junio pasado. Además, logró victorias jerárquicas en los clásicos Perú (G2) y Otoño (G2), en el Argentino, y Clausura (G2) y Organización Sudamericana del Fomento del SPC (G3), en el Bosque. Su legajo, para dar más muestras de su protagonismo desde potrillo, abarca además dos placé en el República Argentina (G1) y otro en el Classic, entre otras figuraciones clásicas. Lo espera el haras, desde la temporada 2022. Quedarán los detalles, que llegarán con el tiempo.
"Con todo el dolor del mundo nos toca despedirte de las pistas. Me encantaría poder tener salud para poder entrenar algún hijo tuyo, porque seguramente me vas a dar muchas satisfacciones como padrillo. Te vamos a extrañar mucho", compartió en sus redes Alfredo Gaitán Dassie, su último entrenador, junto a una imponente foto de parte del equipo en la pista de césped del Campo 2 de San Isidro que fue tomada tras ganar el Dardo Rocha el año pasado.
Rodrigo Blanco, que llegó a su montura en las últimas carreras, agradeció al haras, al equipo de Gaitán y también dejó sus sensaciones: "Gracias, Tuerto querido. Te voy a extrañar. Hago un pequeño reconocimiento a un caballo con una nobleza inalcanzable. Ustedes, que nos llevan a lo más alto, que dejan hasta lo último en cada carrera, gracias. Me toca a mí acompañarte, comprendiendo tu lesión y sufriendo igual que vos. Pero acá estoy, a tu lado y eternamente agradecido por los momentos que me hiciste vivir. Tu nobleza y corazón no se pueden explicar con palabras. Te miraba a los ojos y entendía todo lo que sentías en ese momento. Peleaste hasta el final, como todo guerrero".
Con éxitos desde los 1800 a los 2400 metros y un quinto puesto en el Carlos Pellegrini (G1) en su única presentación sobre césped, el ejemplar nacido el 5 de septiembre de 2015 fue la primera cría de su madre tras ser importada desde los Estados Unidos y tiene un hermano materno, el potrillo Unava Hit (Hit t a Bomb), en entrenamiento en el mismo hipódromo que deja para iniciar una nueva vida.
"Punto final para la carrera en las pistas de Emotion Orpen. Con todo el dolor del mundo, pero con la satisfacción de haberlo disfrutado tanto, lo despedimos. Una lesión en la cuerda de su mano izquierda y en la paleta (producida en carrera) nos obliga a decir basta. Gracias Ariel (peón), Hugo (Galopador), Silvita (capataz), familia Gaitán (entrenadores) y a todo el equipo de trabajo por haberlo cuidado tanto. Gracias Rodrigo Blanco por tu compromiso y por tu amor al tuerto, nos va a quedar la espina del Latino... algún día la vamos a sacar. ¡Pero muchos G1 más nos esperan! Gracias a todos los que pasaron por su vida, desde los chicos del haras, pasando por el equipo de City Bell que lo cuidó en la cuarentena y especialmente a Carly Etchechoury y Leandro Gonçalves, quienes fueron fundamentales en sus comienzos. Podrán haber muchos mejores, pero ninguno será como él. Ese corazón de guerrero lo convierte en único. No fue uno más, con sus limitaciones nos enseñó que todo es posible si se pone el corazón. Un claro ejemplo de superación. Gracias Tuerto", describió Ezequiel Valle, en palabras personales que son el mensaje de la cabaña entera.
A los 6 años, el hijo de la estadounidense Unavailable (Distorted Humor) se despide con ocho triunfos en 24 carreras, incluyendo los grandes premios Provincia de Buenos Aires y Dardo Rocha, en La Plata, y Estrellas Classic, en Palermo, en junio pasado. Además, logró victorias jerárquicas en los clásicos Perú (G2) y Otoño (G2), en el Argentino, y Clausura (G2) y Organización Sudamericana del Fomento del SPC (G3), en el Bosque. Su legajo, para dar más muestras de su protagonismo desde potrillo, abarca además dos placé en el República Argentina (G1) y otro en el Classic, entre otras figuraciones clásicas. Lo espera el haras, desde la temporada 2022. Quedarán los detalles, que llegarán con el tiempo.
"Con todo el dolor del mundo nos toca despedirte de las pistas. Me encantaría poder tener salud para poder entrenar algún hijo tuyo, porque seguramente me vas a dar muchas satisfacciones como padrillo. Te vamos a extrañar mucho", compartió en sus redes Alfredo Gaitán Dassie, su último entrenador, junto a una imponente foto de parte del equipo en la pista de césped del Campo 2 de San Isidro que fue tomada tras ganar el Dardo Rocha el año pasado.
Rodrigo Blanco, que llegó a su montura en las últimas carreras, agradeció al haras, al equipo de Gaitán y también dejó sus sensaciones: "Gracias, Tuerto querido. Te voy a extrañar. Hago un pequeño reconocimiento a un caballo con una nobleza inalcanzable. Ustedes, que nos llevan a lo más alto, que dejan hasta lo último en cada carrera, gracias. Me toca a mí acompañarte, comprendiendo tu lesión y sufriendo igual que vos. Pero acá estoy, a tu lado y eternamente agradecido por los momentos que me hiciste vivir. Tu nobleza y corazón no se pueden explicar con palabras. Te miraba a los ojos y entendía todo lo que sentías en ese momento. Peleaste hasta el final, como todo guerrero".
Con éxitos desde los 1800 a los 2400 metros y un quinto puesto en el Carlos Pellegrini (G1) en su única presentación sobre césped, el ejemplar nacido el 5 de septiembre de 2015 fue la primera cría de su madre tras ser importada desde los Estados Unidos y tiene un hermano materno, el potrillo Unava Hit (Hit t a Bomb), en entrenamiento en el mismo hipódromo que deja para iniciar una nueva vida.
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