DON BECO, evito la sorpresa en el Clásico Haras Ojo de Agua (L).
Las carreras de caballos suelen reservar sorpresas y si en el Clásico Haras Ojo de Agua (L) no se hizo la del puntero y outsider Echo Chamber (Il Campione), que por poco no estampó en el totalizador de San Isidro un sport de $ 39,45, fue sencillamente por la forma en que se prodigó Don Beco (Lenovo), que le dio alcance al marplatense a 200 metros del disco y terminó derrotándolo por tres cuartos de cuerpo.
La ausencia de Santo Dios (Easing Along) le quitó a la carrera estelar de la reunión dominical norteña a una de sus principales figuras, pero esa circunstancia no le restó atractivo a una carrera que terminó teniendo una definición tan inesperada como emocionante.
Y eso ocurrió en gran parte por la manera en que salió a buscar la victoria Eco Chamber, el más liviano y el menos jugado del lote de 8 ejemplares que animaron la carrera. Porque el representante de El Chesco Viejo aprovechó al máximo los 48 kilos que le asignó el handicapper para equiparar chances con ejemplares ganadores y con roce clásico (había salido de perdedor por 7 cuerpos en Tandil). El pupilo de Walter Rodríguez, a su vez, intentó demostrar que cualquier caballo anotado puede ganar.
Y si no lo consiguió el alazán fue sencillamente porque se topó con la evolución de Don Beco, ejemplar que precisamente venía de ganar en los 1400 metros de césped con codo, y que en la misma pista y distancia evitó lo que hubiese sido un verdadero nockout para la cátedra.
En la entrada a la recta William Pereyra, jockey del representante de Pergamino que entrena Miguel Lagos Mármol y presentó Hugo Mujica, advirtió que el verdadero enemigo, el caballo a vencer, estaba adelante, y entonces se lanzó a la caza del vanguardista. Por un tramo pareció que a Echo Chamber no lo agarraban más, pero en los 250 Don Beco igualó la línea del vanguardista y metros más adelante le estiró ventaja, para alcanzar su primera meta jerárquica con tred cuartos de cuerpo de ventaja.
Dos cuerpos más atrás, Soviet Again (Seek Again) completó el tercer escalón de podio. En tanto que el gran favorito Amiguito Lunático (Todo Un Amiguito) sólo consiguió arribar cuarto y sin participar de la definición.
De esta manera y tras dos intentos anteriores en el Clásico Oswaldo Aranha (L) platense -escoltó a Tío Boy- y en el Handicap Juan Esteban Bianchi -terminó sexto a diez cuerpos y un cuarto de Dalbornell-, Don Beco consiguió su primer éxito fuera del llano. Y parece contar con recursos para transitar por ese nivel con buen suceso.
Las carreras de caballos suelen reservar sorpresas y si en el Clásico Haras Ojo de Agua (L) no se hizo la del puntero y outsider Echo Chamber (Il Campione), que por poco no estampó en el totalizador de San Isidro un sport de $ 39,45, fue sencillamente por la forma en que se prodigó Don Beco (Lenovo), que le dio alcance al marplatense a 200 metros del disco y terminó derrotándolo por tres cuartos de cuerpo.
La ausencia de Santo Dios (Easing Along) le quitó a la carrera estelar de la reunión dominical norteña a una de sus principales figuras, pero esa circunstancia no le restó atractivo a una carrera que terminó teniendo una definición tan inesperada como emocionante.
Y eso ocurrió en gran parte por la manera en que salió a buscar la victoria Eco Chamber, el más liviano y el menos jugado del lote de 8 ejemplares que animaron la carrera. Porque el representante de El Chesco Viejo aprovechó al máximo los 48 kilos que le asignó el handicapper para equiparar chances con ejemplares ganadores y con roce clásico (había salido de perdedor por 7 cuerpos en Tandil). El pupilo de Walter Rodríguez, a su vez, intentó demostrar que cualquier caballo anotado puede ganar.
Y si no lo consiguió el alazán fue sencillamente porque se topó con la evolución de Don Beco, ejemplar que precisamente venía de ganar en los 1400 metros de césped con codo, y que en la misma pista y distancia evitó lo que hubiese sido un verdadero nockout para la cátedra.
En la entrada a la recta William Pereyra, jockey del representante de Pergamino que entrena Miguel Lagos Mármol y presentó Hugo Mujica, advirtió que el verdadero enemigo, el caballo a vencer, estaba adelante, y entonces se lanzó a la caza del vanguardista. Por un tramo pareció que a Echo Chamber no lo agarraban más, pero en los 250 Don Beco igualó la línea del vanguardista y metros más adelante le estiró ventaja, para alcanzar su primera meta jerárquica con tred cuartos de cuerpo de ventaja.
Dos cuerpos más atrás, Soviet Again (Seek Again) completó el tercer escalón de podio. En tanto que el gran favorito Amiguito Lunático (Todo Un Amiguito) sólo consiguió arribar cuarto y sin participar de la definición.
De esta manera y tras dos intentos anteriores en el Clásico Oswaldo Aranha (L) platense -escoltó a Tío Boy- y en el Handicap Juan Esteban Bianchi -terminó sexto a diez cuerpos y un cuarto de Dalbornell-, Don Beco consiguió su primer éxito fuera del llano. Y parece contar con recursos para transitar por ese nivel con buen suceso.
La ausencia de Santo Dios (Easing Along) le quitó a la carrera estelar de la reunión dominical norteña a una de sus principales figuras, pero esa circunstancia no le restó atractivo a una carrera que terminó teniendo una definición tan inesperada como emocionante.
Y eso ocurrió en gran parte por la manera en que salió a buscar la victoria Eco Chamber, el más liviano y el menos jugado del lote de 8 ejemplares que animaron la carrera. Porque el representante de El Chesco Viejo aprovechó al máximo los 48 kilos que le asignó el handicapper para equiparar chances con ejemplares ganadores y con roce clásico (había salido de perdedor por 7 cuerpos en Tandil). El pupilo de Walter Rodríguez, a su vez, intentó demostrar que cualquier caballo anotado puede ganar.
Y si no lo consiguió el alazán fue sencillamente porque se topó con la evolución de Don Beco, ejemplar que precisamente venía de ganar en los 1400 metros de césped con codo, y que en la misma pista y distancia evitó lo que hubiese sido un verdadero nockout para la cátedra.
En la entrada a la recta William Pereyra, jockey del representante de Pergamino que entrena Miguel Lagos Mármol y presentó Hugo Mujica, advirtió que el verdadero enemigo, el caballo a vencer, estaba adelante, y entonces se lanzó a la caza del vanguardista. Por un tramo pareció que a Echo Chamber no lo agarraban más, pero en los 250 Don Beco igualó la línea del vanguardista y metros más adelante le estiró ventaja, para alcanzar su primera meta jerárquica con tred cuartos de cuerpo de ventaja.
Dos cuerpos más atrás, Soviet Again (Seek Again) completó el tercer escalón de podio. En tanto que el gran favorito Amiguito Lunático (Todo Un Amiguito) sólo consiguió arribar cuarto y sin participar de la definición.
De esta manera y tras dos intentos anteriores en el Clásico Oswaldo Aranha (L) platense -escoltó a Tío Boy- y en el Handicap Juan Esteban Bianchi -terminó sexto a diez cuerpos y un cuarto de Dalbornell-, Don Beco consiguió su primer éxito fuera del llano. Y parece contar con recursos para transitar por ese nivel con buen suceso.
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