ONE IN TEN por dos cuerpos y 1/2
El triunfo de One in Ten (Endorsement) en el Handicap Craganour, este miércoles en la milla de arena de San Isidro, fue el mejor de los cuatro que consiguió en su corta campaña el representante del stud Victoria. No sólo por la categoría de la carrera, sino por la manera en la que el alazán logró imponerse en su primera visita al hipódromo del Jockey Club.
Aunque es entrenado en el Campo 2, curiosamente todas sus presentaciones anteriores habían sido en Palermo, también sobre la misma superficie, y ese éxito diferente que buscó en diciembre, cuando escoltó a Roman the Mad (Roman Ruler) en su primer desafío en un Handicap, lo logró ahora, de punta a punta. Y Juan Cruz Villagra, que no lo había corrido con anterioridad, lo llevó como si toda la vida hubiera estado en su montura.
El primer secreto detrás del triunfo por dos cuerpos y medio estuvo en la guía. Después, claro está, en las respuestas que ofreció el ejemplar cuyo pique le permitió salir al frente con comodidad, la velocidad que tuvo para sostenerse en esa posición, el coraje para contener los asedios y el remate para definir la prueba. Así fue como, con parciales de 25s15/100, 47s47/100 y 1m11s42/100, fue acelerando paulatinamente para defender el éxito.
Perfect Smile (Sigfrid) fue el que lo siguió, Te Lactagogo (Sidney´s Candy) tomó la posta al llegar al derecho e intentó superarlo filtrándose por los palos y cuando ambos se quedaron sin energías, Scotch and Soda (Luhuk) y Don Lobo (Verrezano) surgieron desde la mitad del lote para trepar. Y en ese orden cruzaron segundo y tercero, separados por un cuerpo y medio.
Caballo al que debutó Pablo Falero a fines de noviembre de 2019, poco antes de dejar la profesión de jockey, One in Ten tardó cuatro carreras en salir de perdedor, pero luego comenzó a darle a su entrenador, Guillermo Frenkel Santillán, las señales positivas que espera de él. Y el criado en el haras La Quebrada fue atrapando primeros puestos con una evolución que ya le permite tener expectativas más allá de las pruebas con ventajas en los pesos e, incluso, más allá de la milla, pues también ganó en 2000 metros.
El triunfo de One in Ten (Endorsement) en el Handicap Craganour, este miércoles en la milla de arena de San Isidro, fue el mejor de los cuatro que consiguió en su corta campaña el representante del stud Victoria. No sólo por la categoría de la carrera, sino por la manera en la que el alazán logró imponerse en su primera visita al hipódromo del Jockey Club.
Aunque es entrenado en el Campo 2, curiosamente todas sus presentaciones anteriores habían sido en Palermo, también sobre la misma superficie, y ese éxito diferente que buscó en diciembre, cuando escoltó a Roman the Mad (Roman Ruler) en su primer desafío en un Handicap, lo logró ahora, de punta a punta. Y Juan Cruz Villagra, que no lo había corrido con anterioridad, lo llevó como si toda la vida hubiera estado en su montura.
El primer secreto detrás del triunfo por dos cuerpos y medio estuvo en la guía. Después, claro está, en las respuestas que ofreció el ejemplar cuyo pique le permitió salir al frente con comodidad, la velocidad que tuvo para sostenerse en esa posición, el coraje para contener los asedios y el remate para definir la prueba. Así fue como, con parciales de 25s15/100, 47s47/100 y 1m11s42/100, fue acelerando paulatinamente para defender el éxito.
Perfect Smile (Sigfrid) fue el que lo siguió, Te Lactagogo (Sidney´s Candy) tomó la posta al llegar al derecho e intentó superarlo filtrándose por los palos y cuando ambos se quedaron sin energías, Scotch and Soda (Luhuk) y Don Lobo (Verrezano) surgieron desde la mitad del lote para trepar. Y en ese orden cruzaron segundo y tercero, separados por un cuerpo y medio.
Caballo al que debutó Pablo Falero a fines de noviembre de 2019, poco antes de dejar la profesión de jockey, One in Ten tardó cuatro carreras en salir de perdedor, pero luego comenzó a darle a su entrenador, Guillermo Frenkel Santillán, las señales positivas que espera de él. Y el criado en el haras La Quebrada fue atrapando primeros puestos con una evolución que ya le permite tener expectativas más allá de las pruebas con ventajas en los pesos e, incluso, más allá de la milla, pues también ganó en 2000 metros.
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