MIRIÑAQUE YA PISO SUELO URUGUAYO
Antes de conocerse la lista definitiva de participantes del Gran Premio Longines Latinoamericano (G1), que se hará el domingo 24 de este mes en los dos kilómetros de arena del hipódromo de Maroñas, uno de los visitantes ya está alojado en el Tattersall del escenario uruguayo. Se trata de Miriñaque (Hurricane Cat), el tordillo argentino que esta temporada compitió en Estados Unidos, Arabia Saudita, San Isidro y ahora encara una nueva experiencia en el exterior, del otro lado del Río de la Plata, como el tercer nominado de su país. Por lo pronto, fue el primero en viajar.
A 20 días de la carrera, el representante del stud Parque Patricios salió de su box en Palermo este lunes y amaneció en suelo uruguayo el martes, luego de un recorrido en camión que superó las 10 horas de viaje. Una decisión que contrasta con la que adoptará la mayoría de los extranjeros, que llegarán la semana previa, luego de haber finalizado la puesta a punto en casa. En ese periplo, el caballo que entrena María Cristina Muñoz tuvo alguna complicación para cruzar la frontera de Fray Ventos, algo que suele repetirse en este tipo de viajes y esta vez sumó un factor adicional.
Las autorizaciones sanitarias para migraciones ya estaban desde el viernes pasado, pero al momento de llegar el camión que trasladaba a Miriñaque, todavía no habían llegado al organismo de control. Sin sistema y sin que funcionen algunas comunicaciones, por la caída del WhatsApp, entre otras cosas, la preparadora, el peón, Sergio Toscani en su rol de galopador y el tordo debieron armarse de paciencia hasta la noche. Así, el martes comenzó su jornada de cuarentena dentro del hipódromo, con movimientos muy limitados.
Se lo vio caminando en ese sector, con una bandera argentina sobre una manta celeste, y la propia Muñoz compartió unas imágenes a través de su cuenta de Instagram. Desde el entorno del ejemplar admitieron que, más allá de la extensión del viaje por ese inconveniente, el ejemplar al que volverá a montar Francisco Gonçalves, su jinete antes de que viaje a Estados Unidos, asimiló bien el traslado y llegó en buenas condiciones.
Antes de conocerse la lista definitiva de participantes del Gran Premio Longines Latinoamericano (G1), que se hará el domingo 24 de este mes en los dos kilómetros de arena del hipódromo de Maroñas, uno de los visitantes ya está alojado en el Tattersall del escenario uruguayo. Se trata de Miriñaque (Hurricane Cat), el tordillo argentino que esta temporada compitió en Estados Unidos, Arabia Saudita, San Isidro y ahora encara una nueva experiencia en el exterior, del otro lado del Río de la Plata, como el tercer nominado de su país. Por lo pronto, fue el primero en viajar.
A 20 días de la carrera, el representante del stud Parque Patricios salió de su box en Palermo este lunes y amaneció en suelo uruguayo el martes, luego de un recorrido en camión que superó las 10 horas de viaje. Una decisión que contrasta con la que adoptará la mayoría de los extranjeros, que llegarán la semana previa, luego de haber finalizado la puesta a punto en casa. En ese periplo, el caballo que entrena María Cristina Muñoz tuvo alguna complicación para cruzar la frontera de Fray Ventos, algo que suele repetirse en este tipo de viajes y esta vez sumó un factor adicional.
Las autorizaciones sanitarias para migraciones ya estaban desde el viernes pasado, pero al momento de llegar el camión que trasladaba a Miriñaque, todavía no habían llegado al organismo de control. Sin sistema y sin que funcionen algunas comunicaciones, por la caída del WhatsApp, entre otras cosas, la preparadora, el peón, Sergio Toscani en su rol de galopador y el tordo debieron armarse de paciencia hasta la noche. Así, el martes comenzó su jornada de cuarentena dentro del hipódromo, con movimientos muy limitados.
Se lo vio caminando en ese sector, con una bandera argentina sobre una manta celeste, y la propia Muñoz compartió unas imágenes a través de su cuenta de Instagram. Desde el entorno del ejemplar admitieron que, más allá de la extensión del viaje por ese inconveniente, el ejemplar al que volverá a montar Francisco Gonçalves, su jinete antes de que viaje a Estados Unidos, asimiló bien el traslado y llegó en buenas condiciones.
A 20 días de la carrera, el representante del stud Parque Patricios salió de su box en Palermo este lunes y amaneció en suelo uruguayo el martes, luego de un recorrido en camión que superó las 10 horas de viaje. Una decisión que contrasta con la que adoptará la mayoría de los extranjeros, que llegarán la semana previa, luego de haber finalizado la puesta a punto en casa. En ese periplo, el caballo que entrena María Cristina Muñoz tuvo alguna complicación para cruzar la frontera de Fray Ventos, algo que suele repetirse en este tipo de viajes y esta vez sumó un factor adicional.
Las autorizaciones sanitarias para migraciones ya estaban desde el viernes pasado, pero al momento de llegar el camión que trasladaba a Miriñaque, todavía no habían llegado al organismo de control. Sin sistema y sin que funcionen algunas comunicaciones, por la caída del WhatsApp, entre otras cosas, la preparadora, el peón, Sergio Toscani en su rol de galopador y el tordo debieron armarse de paciencia hasta la noche. Así, el martes comenzó su jornada de cuarentena dentro del hipódromo, con movimientos muy limitados.
Se lo vio caminando en ese sector, con una bandera argentina sobre una manta celeste, y la propia Muñoz compartió unas imágenes a través de su cuenta de Instagram. Desde el entorno del ejemplar admitieron que, más allá de la extensión del viaje por ese inconveniente, el ejemplar al que volverá a montar Francisco Gonçalves, su jinete antes de que viaje a Estados Unidos, asimiló bien el traslado y llegó en buenas condiciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario