LA INDUSTRIA DEL TURF

LA INDUSTRIA DEL TURF

Ariel

Ariel

Marquito

Marquito

LOGO

LOGO

lunes, 31 de mayo de 2021

ESTADOS UNIDOS

Mala carrera de LA RENOLETA
El retorno de La Renoleta (Treasure Beach), después de 14 meses sin ser de la partida, fue cerrando la marcha sin prestar competencia, en igual categoría condicional y pista de su debut exitoso en Estados Unidos. Ahí no sólo perdió invicto, sino que además, por anormal de la performance para su concepto, abrió un interrogante gigante de cara al Shawnee Stakes (1700m), del sábado en Churchill Downs. El espejismo se profundizó: fue penúltima a 16 cuerpos y un cuarto entre ocho ratificadas. Ganó Envoutante (Uncle Mo) .
El consagrado entrenador Steven Asmussen trasladó a la ex pupila de Javier Fren al circo de Louisville una vez finiquitada la reaparición, programó un par de trabajos serios (800 y 1000 metros) y tomó el siguiente desafío. Cambió el escenario para la inmaculada en cuatro encuentros en Argentina, incluso el Gran Premio Estrellas Distaff (G1-2000m), pero no la performance.
Conducida por Ricardo Santana Jr. (el jockey de sus tres incursiones en Norteamérica), la nieta materna de Tale Of The Cat fue parte del pelotón hasta que el asunto se puso serio. De ahí en más todo fue cuesta arriba para la más veterana del lote. El remate fue sin acción. De hecho, la actitud del piloto panameño fue exactamente igual a la de un mes atrás en Oaklawn Park: dejarla finalizar sin apremios.
En el otro extremo, Envoutante desbordó en el derecho a la puntera Miss Bigly (Gemologist) y escapó sin atenuantes para un lauro de 4¼ cuerpos, al cabo de 1m42s59/100 sobre la arena normal. A pesar del reclamo por echarse adentro en la recta, no hubo cambios por parte de los comisarios. La gran favorita de las apuestas acaparó su quinto trofeo en 12 puestas en escena, para una cartilla de doble heroína gradual y nunca por debajo del marcador desde que se estrenó, incluso con segundo, tercero y cuarto en la máxima categoría.
Para La Renoleta, definitivamente la necesidad de barajar y dar otra vez. Ya sea por la lesión que obligó al extenso paréntesis o bien cuestiones naturales por el paso del tiempo, si en la previa al Shawnee había más preguntas que respuestas, entonces ahora esa ecuación se profundiza aún más. Su vida de película jamás le agotará el crédito para levantarse, tal como cuando le ganó a la mismísima muerta en 2018. Los ojos apuntan a las sabias manos de Asmussen para que la ansiedad por una rehabilitación se cristalice entre tanto cariño del aficionado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario