EVANGEL NISTEL volvió al triunfo
Está de regreso en todos los sentidos Evangel Nistel (Van Nistelrooy), la yegua que en 2019 obtuvo uno de los turnos del Especial Encuentro Provincial, el año pasado se adjudicó el Clásico Venezuela (G2) y este lunes se anotó su tercer éxito de jerarquía en el Handicap Farsalia. En la arena del hipódromo de Palermo y sobre 1200 metros, le tiró cinco cuerpos a Che Gaviota (Violence) en el 1-2 del entrenador Juan Carlos Nievas.
Volvió a subir la apuesta la representante del stud MM, tras utilizar un cotejo condicional como plataforma de despegue. Luego de nueve meses sin correr y de un año sin vencer, ahora le tomó el gusto otra vez y apiló dos primeros consecutivos, ya que hace algo más de cuatro semanas había vencido por la cabeza en un compromiso de 1000 metros. Esta vez, con uno de los pesos más alto, fue contundente.
En la salida se acomodó segunda, tras los pasos de la puntera Nasya (Art Master), la otra participante que corría con 59 kilos, pero Brian Enrique no se inquietó por el ritmo que pudiera imponer esa rival. Esperó hasta el final del codo para iniciar la aproximación, incluso tomando la decisión de apartarla de los palos para llegar al derecho por afuera de la vanguardista. Y en la recta, no la perdonó.
La alcanzó pronto, pasó al frente sin acelerar a fondo y de los 300 al disco se puso a correr, distanciándose de una Nasya que perdía velocidad y permaneciendo fuera del radar de las atropelladoras. Se dedicó, entonces, a acumular diferencias la zaina criada en el haras Firmamento, mientras Che Gaviota escalaba hasta el placé, dejando al anca a Not True Sale (True Cause) en el tercer lugar y cuarta a la puntera, que salvó la posición por tres cuartos de cuerpo sobre Madero Girl (Greenspring).
Son cinco conquistas en 10 presentaciones para Evangel Nistel, que a finales del año pasado había dejado una huella entre las velocistas que compiten en la arena al graduarse delante de adversarias de la talla de La Hilary (Grand Reward) y Queen Liz (Lizard Island). Ahora, en el camino de reconstrucción de su mejor perfil, el plano condicional sirvió para tomar impulso y este cotejo con ventajas en los pesos, para ratificar que está para volver a dar batalla en la categoría. Pero, además, que tiene con qué ilusionar en los cotejos de codo, lo que deja en claro que le aporta variantes a su gente en la búsqueda de opciones en el calendario.
Está de regreso en todos los sentidos Evangel Nistel (Van Nistelrooy), la yegua que en 2019 obtuvo uno de los turnos del Especial Encuentro Provincial, el año pasado se adjudicó el Clásico Venezuela (G2) y este lunes se anotó su tercer éxito de jerarquía en el Handicap Farsalia. En la arena del hipódromo de Palermo y sobre 1200 metros, le tiró cinco cuerpos a Che Gaviota (Violence) en el 1-2 del entrenador Juan Carlos Nievas.
Volvió a subir la apuesta la representante del stud MM, tras utilizar un cotejo condicional como plataforma de despegue. Luego de nueve meses sin correr y de un año sin vencer, ahora le tomó el gusto otra vez y apiló dos primeros consecutivos, ya que hace algo más de cuatro semanas había vencido por la cabeza en un compromiso de 1000 metros. Esta vez, con uno de los pesos más alto, fue contundente.
En la salida se acomodó segunda, tras los pasos de la puntera Nasya (Art Master), la otra participante que corría con 59 kilos, pero Brian Enrique no se inquietó por el ritmo que pudiera imponer esa rival. Esperó hasta el final del codo para iniciar la aproximación, incluso tomando la decisión de apartarla de los palos para llegar al derecho por afuera de la vanguardista. Y en la recta, no la perdonó.
La alcanzó pronto, pasó al frente sin acelerar a fondo y de los 300 al disco se puso a correr, distanciándose de una Nasya que perdía velocidad y permaneciendo fuera del radar de las atropelladoras. Se dedicó, entonces, a acumular diferencias la zaina criada en el haras Firmamento, mientras Che Gaviota escalaba hasta el placé, dejando al anca a Not True Sale (True Cause) en el tercer lugar y cuarta a la puntera, que salvó la posición por tres cuartos de cuerpo sobre Madero Girl (Greenspring).
Son cinco conquistas en 10 presentaciones para Evangel Nistel, que a finales del año pasado había dejado una huella entre las velocistas que compiten en la arena al graduarse delante de adversarias de la talla de La Hilary (Grand Reward) y Queen Liz (Lizard Island). Ahora, en el camino de reconstrucción de su mejor perfil, el plano condicional sirvió para tomar impulso y este cotejo con ventajas en los pesos, para ratificar que está para volver a dar batalla en la categoría. Pero, además, que tiene con qué ilusionar en los cotejos de codo, lo que deja en claro que le aporta variantes a su gente en la búsqueda de opciones en el calendario.
Volvió a subir la apuesta la representante del stud MM, tras utilizar un cotejo condicional como plataforma de despegue. Luego de nueve meses sin correr y de un año sin vencer, ahora le tomó el gusto otra vez y apiló dos primeros consecutivos, ya que hace algo más de cuatro semanas había vencido por la cabeza en un compromiso de 1000 metros. Esta vez, con uno de los pesos más alto, fue contundente.
En la salida se acomodó segunda, tras los pasos de la puntera Nasya (Art Master), la otra participante que corría con 59 kilos, pero Brian Enrique no se inquietó por el ritmo que pudiera imponer esa rival. Esperó hasta el final del codo para iniciar la aproximación, incluso tomando la decisión de apartarla de los palos para llegar al derecho por afuera de la vanguardista. Y en la recta, no la perdonó.
La alcanzó pronto, pasó al frente sin acelerar a fondo y de los 300 al disco se puso a correr, distanciándose de una Nasya que perdía velocidad y permaneciendo fuera del radar de las atropelladoras. Se dedicó, entonces, a acumular diferencias la zaina criada en el haras Firmamento, mientras Che Gaviota escalaba hasta el placé, dejando al anca a Not True Sale (True Cause) en el tercer lugar y cuarta a la puntera, que salvó la posición por tres cuartos de cuerpo sobre Madero Girl (Greenspring).
Son cinco conquistas en 10 presentaciones para Evangel Nistel, que a finales del año pasado había dejado una huella entre las velocistas que compiten en la arena al graduarse delante de adversarias de la talla de La Hilary (Grand Reward) y Queen Liz (Lizard Island). Ahora, en el camino de reconstrucción de su mejor perfil, el plano condicional sirvió para tomar impulso y este cotejo con ventajas en los pesos, para ratificar que está para volver a dar batalla en la categoría. Pero, además, que tiene con qué ilusionar en los cotejos de codo, lo que deja en claro que le aporta variantes a su gente en la búsqueda de opciones en el calendario.
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