CANDY BEER bien prolijo
En el Handicap Simonside, la carrera principal de este martes atípico en el hipódromo de San Isidro, lo que marcó la diferencia fue la claridad para resolver la situación que tuvo Gustavo Calvente con Candy Beer (Señor Candy). El favorito llevó el peso de la prueba, al concederle ventajas a sus siete rivales en ese sentido, pero eso no hizo mella en la efectividad de su avance, mientras algunos de sus principales enemigos se encontraban con obstáculos en el camino. Hizo todo prolijo el caballo del stud Abuela Chola y fue implacable en el final, dejando la discusión para el segundo puesto.
En la fría estadística se dirá que un cuerpo y medio separó al vencedor del puntero y más liviano del lote, Pembe Savanna (Mount Nelson), que salió a marcar el rumbo sin especular y se defendió hasta el final. Sólo no pudo con Candy Beer, que se acostumbró a ganar y lleva tres presentaciones seguidas mostrándose implacable: esta vez atacó desde la mitad del lote y en el derecho, mientras por adentro proliferaban los roces y la pérdida de espacios, pasó de largo abierto para gestar, además, su tercer festejo en esta categoría y el séptimo impacto de su campaña, en un trazado en el que todavía no había vencido.
Para el escolta y menos jugado, el placé tuvo sabor a éxito, y para ello necesitó una dosis extra de coraje para controlar a Perfect Score (Campanologist), al que dejó tercero por media cabeza, aunque la posición de este último completando el podio sólo se confirmó luego de algunos minutos de flamear la bandera amarilla. Wilson Moreyra, jinete de Croupier (Equal Stripes), reclamó contra Rodrigo Bascuñán, pero fue desestimada la protesta y quedó en el quinto lugar.
Entre ellos terminó Roman Julius (Roman Ruler), uno de los componentes de una yunta de Firmamento que tuvo una carrera para el olvido. A este crédito de Adrián Reisenauer, que se había movido en el lote cercano al líder, se le terminaron los espacios mientras luchaba en la recta, pero reaccionó en el epílogo, cuando salió a media cancha, y cruzó a sólo tres cuerpos. En tanto, One Samurai (First Samurai), que irá a subasta el 9 de diciembre, llegó casi sin correr: indócil en la gatera, largó mal y estuvo tratando de no pialarse detrás del grupo, por adentro. Quedó a seis cuerpos en el disco, apenas delante de Equal Ilusion (Equal Stripes).
Preparado por Marcelo Sueldo y con cuna en Vikeda SRL, Candy Beer comenzó el año como ganador simple y esta temporada gestó seis primeros puestos, en pruebas de 1400 a 1600 metros, en La Plata, Palermo y San Isidro. Y esta vez, con Calvente corriéndolo por primera vez como si lo conociera de toda la vida.
En el Handicap Simonside, la carrera principal de este martes atípico en el hipódromo de San Isidro, lo que marcó la diferencia fue la claridad para resolver la situación que tuvo Gustavo Calvente con Candy Beer (Señor Candy). El favorito llevó el peso de la prueba, al concederle ventajas a sus siete rivales en ese sentido, pero eso no hizo mella en la efectividad de su avance, mientras algunos de sus principales enemigos se encontraban con obstáculos en el camino. Hizo todo prolijo el caballo del stud Abuela Chola y fue implacable en el final, dejando la discusión para el segundo puesto.
En la fría estadística se dirá que un cuerpo y medio separó al vencedor del puntero y más liviano del lote, Pembe Savanna (Mount Nelson), que salió a marcar el rumbo sin especular y se defendió hasta el final. Sólo no pudo con Candy Beer, que se acostumbró a ganar y lleva tres presentaciones seguidas mostrándose implacable: esta vez atacó desde la mitad del lote y en el derecho, mientras por adentro proliferaban los roces y la pérdida de espacios, pasó de largo abierto para gestar, además, su tercer festejo en esta categoría y el séptimo impacto de su campaña, en un trazado en el que todavía no había vencido.
Para el escolta y menos jugado, el placé tuvo sabor a éxito, y para ello necesitó una dosis extra de coraje para controlar a Perfect Score (Campanologist), al que dejó tercero por media cabeza, aunque la posición de este último completando el podio sólo se confirmó luego de algunos minutos de flamear la bandera amarilla. Wilson Moreyra, jinete de Croupier (Equal Stripes), reclamó contra Rodrigo Bascuñán, pero fue desestimada la protesta y quedó en el quinto lugar.
Entre ellos terminó Roman Julius (Roman Ruler), uno de los componentes de una yunta de Firmamento que tuvo una carrera para el olvido. A este crédito de Adrián Reisenauer, que se había movido en el lote cercano al líder, se le terminaron los espacios mientras luchaba en la recta, pero reaccionó en el epílogo, cuando salió a media cancha, y cruzó a sólo tres cuerpos. En tanto, One Samurai (First Samurai), que irá a subasta el 9 de diciembre, llegó casi sin correr: indócil en la gatera, largó mal y estuvo tratando de no pialarse detrás del grupo, por adentro. Quedó a seis cuerpos en el disco, apenas delante de Equal Ilusion (Equal Stripes).
Preparado por Marcelo Sueldo y con cuna en Vikeda SRL, Candy Beer comenzó el año como ganador simple y esta temporada gestó seis primeros puestos, en pruebas de 1400 a 1600 metros, en La Plata, Palermo y San Isidro. Y esta vez, con Calvente corriéndolo por primera vez como si lo conociera de toda la vida.
En la fría estadística se dirá que un cuerpo y medio separó al vencedor del puntero y más liviano del lote, Pembe Savanna (Mount Nelson), que salió a marcar el rumbo sin especular y se defendió hasta el final. Sólo no pudo con Candy Beer, que se acostumbró a ganar y lleva tres presentaciones seguidas mostrándose implacable: esta vez atacó desde la mitad del lote y en el derecho, mientras por adentro proliferaban los roces y la pérdida de espacios, pasó de largo abierto para gestar, además, su tercer festejo en esta categoría y el séptimo impacto de su campaña, en un trazado en el que todavía no había vencido.
Para el escolta y menos jugado, el placé tuvo sabor a éxito, y para ello necesitó una dosis extra de coraje para controlar a Perfect Score (Campanologist), al que dejó tercero por media cabeza, aunque la posición de este último completando el podio sólo se confirmó luego de algunos minutos de flamear la bandera amarilla. Wilson Moreyra, jinete de Croupier (Equal Stripes), reclamó contra Rodrigo Bascuñán, pero fue desestimada la protesta y quedó en el quinto lugar.
Entre ellos terminó Roman Julius (Roman Ruler), uno de los componentes de una yunta de Firmamento que tuvo una carrera para el olvido. A este crédito de Adrián Reisenauer, que se había movido en el lote cercano al líder, se le terminaron los espacios mientras luchaba en la recta, pero reaccionó en el epílogo, cuando salió a media cancha, y cruzó a sólo tres cuerpos. En tanto, One Samurai (First Samurai), que irá a subasta el 9 de diciembre, llegó casi sin correr: indócil en la gatera, largó mal y estuvo tratando de no pialarse detrás del grupo, por adentro. Quedó a seis cuerpos en el disco, apenas delante de Equal Ilusion (Equal Stripes).
Preparado por Marcelo Sueldo y con cuna en Vikeda SRL, Candy Beer comenzó el año como ganador simple y esta temporada gestó seis primeros puestos, en pruebas de 1400 a 1600 metros, en La Plata, Palermo y San Isidro. Y esta vez, con Calvente corriéndolo por primera vez como si lo conociera de toda la vida.
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