DIDIA de punta a punta
El Gran Premio Copa de Plata (G1) prometía ser una carrera bárbara, por la cantidad y la calidad de sus participantes. Terminó siendo un monólogo descomunal de la potranca Didia (Orpen), que fue adelante desde que se abrieron los partidores y no dejó que ninguna rival se le acercara en los 2000 metros corridos en la pista de césped del hipódromo de San Isidro. Este sábado, se impuso de punta a punta y por cuatro cuerpos sobre la brasileña Justify my Love (Agnes Gold) y aunque no necesitó utilizar todas sus energías bajó el récord de la distancia.
En la Copa Arquitecto Roberto Vásquez Mansilla, la zaina que nació, creció y todavía lleva los colores de La Manija cruzó al frente con cuatro cuerpos de ventaja en 1m56s81/100, un registro 1/100 por debajo del que estaba vigente desde el 11 de febrero de 2007, cuando Storm Military (Bernstein) obtuvo el Miguel Alfredo Martínez de Hoz (G1). "Es nacida a fines de octubre. Siempre había mostrado buenas condiciones, pero había que esperar su maduración", dijo Ignacio Pavlovsky, su criador y propietario.
Lo que había visto excedía lo esperado. "Creíamos que iba a hacer una muy buena carrera, pero lo que hizo es como para soñar con probar suerte en el exterior", dijo, casi como pensando en voz alta, el cabañero. A su lado, el preparador Luciano Cerutti daba fe de lo que resultó el proceso de crecimiento de la potranca, que salió de perdedora en julio, se hizo clásica en el Federico de Alvear (G2-1800m) de octubre y se colgó su primera medalla de Grupo 1 el mes pasado en el Enrique Acebal (G1-2000m), siempre con amplitud.
"Andaba bárbaro y al entrar en la recta final sentí que ya era la ganadora. En realidad, cuando habían pasado los primeros 400 metros y vi que sacó tres o cuatro cuerpos ya me quedé tranquilo, sobre todo cuando no veía avanzar a ninguna", aseguró el cuidador. Las que quisieron seguirla no pudieron, las que atropellaron jamás lograron tenerla en el radar.
Marquesa Key (Key Deputy), Escabiar (Portal del Alto) y Polvorada (War Command) fueron intentando sostener el ritmo y lo perdieron. En el derecho, cuando Didia se alejaba la que tomó la posta en la persecución fue la tordilla Justify my Love, que lo suyo terminó siendo la defensa del placé, lejos de una puntera escurridiza. "Hace todo muy fácil. Ella es muy ligera y la dejaron hacer en los primeros metros, por lo que al principio se hizo suave. Después respondió bárbaro, aunque no creí que hubiera ganado en récord", manifestó William Pereyra, su jockey.
Justify my Love apeló a la guapeza para mantener el placé, media cabeza delante de Bononia (Catcher in the Rye), que por dos largos dejó cuarta a Pepper Mill (El Prado Rob), la argentina que regresó de Maroñas para dar una respuesta acorde a las circunstancias. Eagle Scout (Il Campione) dejó el invicto con dignidad: intentó avanzar abierta y llegó a estar tercera antes de cansarse, en su primer examen clásico y más allá de la milla.
En cambio, Didia encontró un camino triunfal que optó por no abandonar. En el pasto, donde solamente perdió al debutar, construyó su lugar en el mundo, aunque sea entrenada en La Plata, a unos 70 kilómetros.
El Gran Premio Copa de Plata (G1) prometía ser una carrera bárbara, por la cantidad y la calidad de sus participantes. Terminó siendo un monólogo descomunal de la potranca Didia (Orpen), que fue adelante desde que se abrieron los partidores y no dejó que ninguna rival se le acercara en los 2000 metros corridos en la pista de césped del hipódromo de San Isidro. Este sábado, se impuso de punta a punta y por cuatro cuerpos sobre la brasileña Justify my Love (Agnes Gold) y aunque no necesitó utilizar todas sus energías bajó el récord de la distancia.
En la Copa Arquitecto Roberto Vásquez Mansilla, la zaina que nació, creció y todavía lleva los colores de La Manija cruzó al frente con cuatro cuerpos de ventaja en 1m56s81/100, un registro 1/100 por debajo del que estaba vigente desde el 11 de febrero de 2007, cuando Storm Military (Bernstein) obtuvo el Miguel Alfredo Martínez de Hoz (G1). "Es nacida a fines de octubre. Siempre había mostrado buenas condiciones, pero había que esperar su maduración", dijo Ignacio Pavlovsky, su criador y propietario.
Lo que había visto excedía lo esperado. "Creíamos que iba a hacer una muy buena carrera, pero lo que hizo es como para soñar con probar suerte en el exterior", dijo, casi como pensando en voz alta, el cabañero. A su lado, el preparador Luciano Cerutti daba fe de lo que resultó el proceso de crecimiento de la potranca, que salió de perdedora en julio, se hizo clásica en el Federico de Alvear (G2-1800m) de octubre y se colgó su primera medalla de Grupo 1 el mes pasado en el Enrique Acebal (G1-2000m), siempre con amplitud.
"Andaba bárbaro y al entrar en la recta final sentí que ya era la ganadora. En realidad, cuando habían pasado los primeros 400 metros y vi que sacó tres o cuatro cuerpos ya me quedé tranquilo, sobre todo cuando no veía avanzar a ninguna", aseguró el cuidador. Las que quisieron seguirla no pudieron, las que atropellaron jamás lograron tenerla en el radar.
Marquesa Key (Key Deputy), Escabiar (Portal del Alto) y Polvorada (War Command) fueron intentando sostener el ritmo y lo perdieron. En el derecho, cuando Didia se alejaba la que tomó la posta en la persecución fue la tordilla Justify my Love, que lo suyo terminó siendo la defensa del placé, lejos de una puntera escurridiza. "Hace todo muy fácil. Ella es muy ligera y la dejaron hacer en los primeros metros, por lo que al principio se hizo suave. Después respondió bárbaro, aunque no creí que hubiera ganado en récord", manifestó William Pereyra, su jockey.
Justify my Love apeló a la guapeza para mantener el placé, media cabeza delante de Bononia (Catcher in the Rye), que por dos largos dejó cuarta a Pepper Mill (El Prado Rob), la argentina que regresó de Maroñas para dar una respuesta acorde a las circunstancias. Eagle Scout (Il Campione) dejó el invicto con dignidad: intentó avanzar abierta y llegó a estar tercera antes de cansarse, en su primer examen clásico y más allá de la milla.
En cambio, Didia encontró un camino triunfal que optó por no abandonar. En el pasto, donde solamente perdió al debutar, construyó su lugar en el mundo, aunque sea entrenada en La Plata, a unos 70 kilómetros.
En la Copa Arquitecto Roberto Vásquez Mansilla, la zaina que nació, creció y todavía lleva los colores de La Manija cruzó al frente con cuatro cuerpos de ventaja en 1m56s81/100, un registro 1/100 por debajo del que estaba vigente desde el 11 de febrero de 2007, cuando Storm Military (Bernstein) obtuvo el Miguel Alfredo Martínez de Hoz (G1). "Es nacida a fines de octubre. Siempre había mostrado buenas condiciones, pero había que esperar su maduración", dijo Ignacio Pavlovsky, su criador y propietario.
Lo que había visto excedía lo esperado. "Creíamos que iba a hacer una muy buena carrera, pero lo que hizo es como para soñar con probar suerte en el exterior", dijo, casi como pensando en voz alta, el cabañero. A su lado, el preparador Luciano Cerutti daba fe de lo que resultó el proceso de crecimiento de la potranca, que salió de perdedora en julio, se hizo clásica en el Federico de Alvear (G2-1800m) de octubre y se colgó su primera medalla de Grupo 1 el mes pasado en el Enrique Acebal (G1-2000m), siempre con amplitud.
"Andaba bárbaro y al entrar en la recta final sentí que ya era la ganadora. En realidad, cuando habían pasado los primeros 400 metros y vi que sacó tres o cuatro cuerpos ya me quedé tranquilo, sobre todo cuando no veía avanzar a ninguna", aseguró el cuidador. Las que quisieron seguirla no pudieron, las que atropellaron jamás lograron tenerla en el radar.
Marquesa Key (Key Deputy), Escabiar (Portal del Alto) y Polvorada (War Command) fueron intentando sostener el ritmo y lo perdieron. En el derecho, cuando Didia se alejaba la que tomó la posta en la persecución fue la tordilla Justify my Love, que lo suyo terminó siendo la defensa del placé, lejos de una puntera escurridiza. "Hace todo muy fácil. Ella es muy ligera y la dejaron hacer en los primeros metros, por lo que al principio se hizo suave. Después respondió bárbaro, aunque no creí que hubiera ganado en récord", manifestó William Pereyra, su jockey.
Justify my Love apeló a la guapeza para mantener el placé, media cabeza delante de Bononia (Catcher in the Rye), que por dos largos dejó cuarta a Pepper Mill (El Prado Rob), la argentina que regresó de Maroñas para dar una respuesta acorde a las circunstancias. Eagle Scout (Il Campione) dejó el invicto con dignidad: intentó avanzar abierta y llegó a estar tercera antes de cansarse, en su primer examen clásico y más allá de la milla.
En cambio, Didia encontró un camino triunfal que optó por no abandonar. En el pasto, donde solamente perdió al debutar, construyó su lugar en el mundo, aunque sea entrenada en La Plata, a unos 70 kilómetros.
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